Este año entró en vigor una nueva reforma laboral que cambia un poco las reglas del juego en cuanto al outsourcing, despidos y sindicatos. Hicimos un resumen para que no te pierdas de nada importante.
Primero lo primero, ¿qué cambió?
Desde el 2018, la legislación laboral ha venido presentando algunos cambios con el fin de beneficiar tanto a empleadores como empleados. El año pasado comenzó a modificar algunos temas relacionados con el outsourcing, cuando se publicó un decreto en el Diario Oficial de la Federación en abril de 2021 que regula la subcontratación de terceros.
Segundo pero no menos importante, ¿qué es el outsourcing?
Lo hemos escuchado muchas veces, pero, ¿te queda claro qué es? Se trata de un término en ingles y adoptado por el español, para referirse a la acción de “terciarizar” un servicio, es decir, de contratar a alguien que ofrezca un servicio para una empresa en particular. Por ejemplo, cuando una empresa necesita contratar el servicio de comedores con una empresa que cuente con meseros, chefs, y los utensilios necesarios para tal actividad. El problema inició cuando las empresas comenzaron a utilizar el outsourcing para reducir gastos y evadir obligaciones fiscales.
¿Qué cambió con la reforma?
Te lo explicamos en unas líneas:
Sólo se puede subcontratar servicios sí y sólo sí no forman parte de la principal actividad de la empresa: esto quiere decir que sí podrán contratar servicios de limpieza o comedores como el ejemplo de arriba, pero no podrán contratar a una empresa que haga papel si la empresa que contrata también es de papelería.
En resumen, sí puedes seguir contratando a otras empresas para que presten sus servicios siempre y cuando no sean la principal actividad de tu empresa. Así que ya sabes, la próxima vez que te pregunten sobre esta nueva reforma, sabrás que responder.
Cuéntanos qué te parece en los comentarios.
